La confianza es la convicción de que tiene las habilidades y los recursos adecuados para enfrentar una situación determinada. Cuando estás con personas que tienen menos confianza, también estás con personas que te consideran como alguien con más recursos emocionales que ellos. Es natural que le confieran un sentido de poder a través de micro-señales o pequeños gestos y actitudes que lo capacitan.
Cuando se invierten los roles, su percepción se ajusta y también lo hace su nivel natural de confianza.
La solución es simple: en ambas situaciones solo necesita una habilidad. Es una habilidad que supera cualquier requisito de confianza en cada situación social.
Es la habilidad de la humildad .
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La humildad no es pensar menos en ti mismo. Es alejar tu enfoque de ti mismo. Cuando desarrollas la habilidad de encontrar un interés sincero en otras personas, estableces un capital social. Literalmente construyes riqueza social.
Al mismo tiempo, la humildad lo pone al nivel de todas las demás personas en la sala y eleva a todas las personas con las que entra en contacto, incluso si parecen más confiadas.
Cuando esté en una sala de personas con menos confianza que usted mismo, los levantará reconociéndolos.
Cuando estés en una sala de personas con más confianza que tú, tendrás la oportunidad de aprender de ellos.
De cualquier manera, la humildad es la solución ganadora.