Tiene todo que ver con el ego. El Ego se identifica con las cosas que nos gustan o poseemos. Cuando lo que identificamos como ‘nuestro’ es atacado, sentimos que es un insulto personal y lanza nuestras defensas, como devolver el golpe o resentir al ‘atacante’.
Un ejemplo: un niño no sentirá mucho dolor si se rompe un carro de juguete en una tienda de juguetes. Pero sentirá mucha tristeza y dolor si su coche de juguete está roto.
Algunas personas se asocian fuertemente con su equipo deportivo. Sienten que es un ataque personal contra ellos mismos si otras personas hablan mal de su equipo. Es lo mismo con las escuelas, con nuestras familias, con nuestra religión, con nuestro país. Debemos comprender que nuestra identidad no se basa en lo que nos gusta o lo que poseemos, sino en quiénes somos como persona.
Romper con el ego.
- ¿Cómo es que no nos convertimos en lo que nos gusta y disfrutamos?
- ¿Por qué una persona me dice que está tratando de que yo los odie?
- ¿Por qué las personas en situaciones desesperadas no se suicidan?
- ¿Cuáles son algunos malos hábitos que necesitamos romper?
- ¿Por qué el orgullo y la burla en algunas personas no cambian a pesar de que han enfrentado una fuerte caída?