Muchos de los que abandonaron la universidad lo hicieron no porque fueran perezosos, sino porque estaban impacientes por continuar con sus ideas. Como ya sabrá, Bill Gates fue el abandono universitario más famoso de Estados Unidos. Estaba impaciente por seguir adelante con su futuro imaginado. Además, él era muy inteligente. Sus padres lo apoyaron y, por lo tanto, no tuvo que salir y “ganarse la vida” o conseguir un TRABAJO y pudo seguir su felicidad. Ahora, solo porque funcionó para él no funciona para todos y aunque funcionó para algunos, uno debe tener mucho cuidado antes de salir de una buena educación para un futuro arriesgado.
En cuanto a lo que piensan de los que se mantuvieron en el curso y terminaron sus estudios, no creo que les importara. La mayoría de los abandonos todavía se sienten un poco culpables, me imagino.