Si bien las personas que hablan menos pueden considerarse como no tan activas en la interacción e introvertidas, las personas que hablan demasiado pueden en el momento ser realmente molestas y exageradas. En ambos casos, lo más probable es que pueda dejar una impresión no tan agradable sobre la audiencia.
Lo que necesita saber es que no necesita hablar demasiado ni mucho menos, solo necesita decir lo correcto en el momento adecuado.
Recuerde que no importa cuánto hable, pero sí lo hace bien y qué contenido habla.
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