Dos cosas vienen a la mente:
- Intentaría enmarcarlo de manera diferente. No sé cuántos años tienes, pero si eres un adulto, entonces te sugeriría que cambies las palabras “debería” y “tengo que” por “querer” y “elegir”. Puede que no te parezca importante, pero Cómo pensamos acerca de las cosas afecta a cómo nos sentimos, lo que afecta a cómo nos comportamos. Y, por lo tanto, describirlo con mayor precisión y de una manera en la que reconozca que nadie lo obliga a hacer cosas, sino que elige hacerlo o no, puede aliviar la ansiedad y la resistencia que siente al respecto.
- Otra cosa que puedes hacer es averiguar si lo que describiste como “lo que tienes que hacer” es algo que realmente quieres hacer y qué ganarás si lo hicieras. ¿Qué valor tiene? ¿Es algo que usted mismo quiere hacer o es algo que otros esperan de usted o lo impulsan a hacer? Si es algo que realmente quieres hacer, recuerda el valor que obtendrás si lo haces. Si no es algo que realmente quieres hacer, entonces no tienes que hacerlo.