Probaría este enfoque de 2 pasos:
1. Muéstrales un futuro más brillante. Haz que visualicen un mundo en el que estén prosperando y divirtiéndose, en el que hayan alcanzado sus sueños y estén viviendo la vida que siempre han deseado.
Si las cosas se ven mal en este momento, muéstrales un futuro que se vea un poco más brillante. Usa tu imaginación y apúntalos en la dirección correcta. ¿Cómo sería su vida si las cosas salieran bien? Una vez que puedan ver un futuro mejor, es hora de dar el segundo paso.
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2. Hazles creer que este futuro más brillante es posible. Una vez que vean un futuro mejor, sus mentes comenzarán a cuestionarlo inmediatamente. “No es posible”. “No es realista”. “No tengo la suficiente suerte”. “No va a suceder”.
Tendencias pesimistas naturales, ¿verdad? La clave para hacerles creer no es preguntarles si es posible, sino preguntarles cómo podría ser posible. ¿Cómo podrían lograr su futuro más brillante? Solo dígales que propongan ideas, no importa lo ridículas que parezcan.
Cuando preguntas cómo , la mente automáticamente creará planes razonables. Y una vez que los pesimistas ven planes razonables, comienzan a creer que tal vez … solo tal vez … es posible que logren un futuro mejor.
Y cuando alguien pueda imaginar un futuro mejor, se sentirá emocionado, motivado, vigorizado y optimista. Ahora tienen algo que ver y trabajar hacia adelante.
Así es como trataría de convertir a un pesimista en un optimista.