A diferencia del fútbol en el que se marca un gol de vez en cuando, el baloncesto es un juego donde una sola canasta no ayudaría a ganar un juego. Entonces los jugadores que anotan usualmente se dicen a sí mismos,
“Amigo, aún queda mucho camino por recorrer, así que vamos a anotar muchos de ellos antes de mostrar los dientes”.
Además, como es un juego rápido, el cambio de ofensiva a defensa y viceversa tiene que ser tan rápido que hace que un jugador se olvide de poner una sonrisa en su rostro. Además, la sonrisa depende de la situación. Si está ganando, entonces puede sonreír y si está perdiendo la sonrisa, no vale la pena.
PD: soy un jugador de baloncesto y sonrío cuando golpeo la diana.