Tu trabajo es ser un padre amoroso para ella en todo momento. Es posible que no tenga ningún interés en ti de vez en cuando en su vida, pero eso no hace ninguna diferencia a largo plazo, siempre y cuando hagas lo siguiente:
- Conozca los detalles de sus actividades diarias. Incluso si no está con ella, no debería haber lagunas en su comprensión de todo lo que su hijo hace o va a hacer.
- Hágale preguntas detalladas con seguimientos. “¿Cómo estuvo tu cita con Susie? ¿Te divertiste? ¿Cómo fueron sus padres? ¿Te dieron algo de comer? ¿Quieres tenerla aquí la próxima vez? ¿De qué hablabas?” Es agotador, pero te acercará más.
- Sé divertido y divertido con sus amigos. Hazlos reír y como tú y tu hija comenzarán a ser posesivos y competitivos por su tiempo y atención.
- Nunca te enojes con ella. La frustración está bien y le pasa a todos, pero hay una gran distinción entre los dos.
- No haga declaraciones absolutas sobre sus capacidades o ambiciones. Si ella quiere ser una luchadora profesional, hazlo. Si discutes o tomas una posición diciéndole que su sueño es estúpido o no para las chicas, harás que se retire de ti.
No es una lista muy larga, pero estas son todas las cosas que he aprendido como el padre de tres hijas maravillosas.