¿Ser ruidoso y desagradable resulta extraño, o es genial expresarse libremente?

Hay una delgada línea de control entre rareza y frialdad.

Esta línea se basa en la percepción de los demás.

Entonces, de acuerdo con las circunstancias y las personas que te rodean, trata de estimarlo.

Todo está bien hasta que estés dentro de la frontera.