No es la religión la que se ofende. Son los custodios autonombrados de las religiones quienes perciben los delitos y deciden castigar a los delincuentes percibidos,
Las religiones enseñan valores nobles, virtudes y moral, no el culto al odio. Aquellos que buscan oportunidades para odiar o propagar el odio, obviamente no siguen las enseñanzas fundamentales de su propia religión y recogen fragmentos de comportamientos situacionales pasados como justificación para Acciones ofensivas.