No hay diferencia que se aplique a todas las personas que logran, en comparación con todas las personas que son promedio. Los individuos son diferentes. Sus niveles de motivación son diferentes. Sus niveles de buena fortuna son diferentes. Las cosas específicas que desean lograr son diferentes. Cualquier patrón en la vida podría sumar éxito o fracaso. A veces las personas muy brillantes se esfuerzan mucho y nunca logran mucho. A veces las personas muy mediocres intentan solo un poco y terminan logrando mucho.
Es mejor estudiar estas situaciones caso por caso que tratar de enfocarse en una “diferencia” que abarca todo y que explica el éxito de todas las personas exitosas. Eso es tonto. Si la respuesta fuera tan simple, entonces todos tendrían éxito.