¿Por qué me siento cómodo contándole a la gente sobre pequeños problemas, pero no sobre otros más importantes?

“Traté de decirle a mi madre que mi depresión empeoraba, pero su respuesta no fue reconfortante”.

Es por eso.

Este es, supongo, el patrón con el que has vivido a lo largo de tu vida. Has aprendido que decirle a la gente no sirve de nada, así que no te preocupes.

Realmente lamento que haya sido así para ti. Es posible desarrollar confianza en los demás hasta el punto de que te sientas capaz de compartir tus preocupaciones más profundas con ellos, pero probablemente tendrás que trabajar más duro que alguien que siempre haya podido confiar en sus padres para recibir apoyo emocional.

Hago eso cuando creo que esa persona no escuchará ni creerá lo que tengo que decir. Que viendo su respuesta me haría sentir peor.

He estado en ambos lados, el tipo sin decir nada y la persona que hace que el otro se sienta peor. Algo de lo que no estoy orgulloso, pero algo inevitable en este mundo donde todos tienen una personalidad y una opinión diferentes.

Encuentro que mantenerlo me come por completo de la manera más desagradable y terrible, así que después de todos estos años he encontrado formas de enfrentarlo. Mi favorito siempre ha sido escribir un diario. Me gustaría bloguear, pero tengo un miedo personal a los comentarios odiosos, por lo que tendré que superar eso en algún momento. Esto es lo que hago cuando me faltan buenos amigos, lo que siempre le sucede a las mejores personas en algún momento de sus vidas. De lo contrario, encuentro diferentes personas con quienes hablar acerca de mis problemas, diferentes porque me parece que la mayoría de las personas no se relacionan al 100% conmigo, sino que lo hacen a un cierto nivel.

Lamento escuchar esas cosas terribles que te suceden, y espero que entiendas que esto no será más que un corto período de tu vida.