Querido investigador,
Alguien, en algún lugar se preocupa por usted, pero puede que no esté en su vecindad inmediata, de hecho, puede estar en el otro lado del mundo.
Así que vive para esa persona mejor e insiste en buscarlos hasta que los encuentres.
Identifique su cultura natural: puede no ser aquella en la que creció o se definió por su etnicidad ancestral.
- ¿Por qué las personas se pelean contigo cuando estás proporcionando evidencia para mostrar dónde están pensando algo incorrectamente?
- ¿Los narcisistas se sienten bien cuando te lastiman?
- ¿Es más probable que los niños que están por debajo y por encima de la clase media tengan problemas de comportamiento?
- ¿Por qué la gente piensa que un niño estará traumatizado si ve a un adulto desnudo?
- ¿La gente realmente ayuda a otras personas?
Nuestra verdadera etnicidad es nuestro futuro hogar, no nuestro pasado, en cualquier parte del mundo, así que deje el nido familiar y busque a sus verdaderos hermanos y hermanas.
Para hacer esto, comienza a investigar otras culturas que puedan interesarte. Para tener acceso a estas culturas, deberá comprometerse a aprender su idioma.
Eventualmente, te encontrarás haciendo las vocales y consonantes que te llegan con mayor facilidad, cantando las canciones de tu corazón y bailando los movimientos de tu propio cuerpo. Sus modales serán aquellos que usted apruebe y su comida que mejor se adapte a su sistema digestivo.
Entonces serás amado más fácilmente. La mayor parte de la intolerancia mundial se debe a las diferencias culturales.
No hay una cultura única en este mundo, ni un solo lenguaje mundial, ni una sociedad humana fundamental, porque no hay una sola mente humana.
Es posible que todos tengamos una nariz, dos piernas, un estómago, etc., pero ahí termina la similitud: en última instancia, todos somos diferentes, lo cual es tan bueno como lo contrario, viviríamos vidas de una monotonía insoportable.
Existe la mente británica, la mente francesa, la mente española y así sucesivamente. Cada país es, en efecto, una mente diferente.
Nos reunimos como individuos diversos, no como iguales, y usamos nuestro sentido de madurez para establecer un diálogo diplomático de adultos que se poseen a sí mismos.
Entonces solo encontraremos paz en este mundo.
Tus amantes están ahí afuera, encuéntralos ahora.
Ferroccio viridiani