Si el trabajador social menciona nombres específicos, es una violación de HIPPA y se debe informar a la Junta de Ciencias del Comportamiento. No debemos mencionar ningún nombre para mantener la privacidad de las personas.
Por supuesto, hay muchos terapeutas que usan sus casos en libros clínicos, pero no mencionan a los clientes con nombres reales. Los nombres se cambian en esos casos.