No evolucionamos para poder hacer más feliz la vida de todos. Evolucionamos porque todas las criaturas evolucionan. Así surgió la diversidad de la vida. La evolución no tiene ningún propósito ni dirección. Los organismos que poseen variantes genéticas más adecuadas para la supervivencia y la reproducción en un entorno particular, y en consecuencia dejan más progenie, son los “favorecidos” por la evolución.
Nuestra inteligencia evolucionó porque era útil para sobrevivir y reproducirse, no porque la “naturaleza” decidiera nada. La “naturaleza” no decide en el sentido en que un ser humano decide. No hubo ningún proceso de pensamiento por naturaleza para dar nuestro tipo de inteligencia a un grupo de monos sociales en lugar de a los grandes felinos.
Habiendo dicho eso, debemos, por supuesto, tener mucho cuidado para preservar el medio ambiente en nuestro planeta lo mejor que podamos. El universo es demasiado vasto para ser influenciado mucho por las acciones humanas. Pero nuestro planeta no lo es. Las actividades humanas ya han impactado seriamente nuestro planeta. No sé por qué las acciones deben ser específicamente 5, pero la principal que me viene a la mente ahora es reducir las emisiones de carbono.