Depende de la visión individual, de la situación y de la riqueza de la familia.
- La cantidad gastada en una fiesta también importa. Si usted es una persona de clase media que organiza una gran fiesta de cumpleaños en un hotel de 5 estrellas, sería una pérdida de dinero. Una pequeña fiesta con amigos cercanos en un restaurante no hace daño.
- A veces las fiestas también pueden ser una bendición. Ayudan a socializar con otras personas y abren muchos caminos para las ganancias y las relaciones. Las grandes empresas no organizan fiestas solo por diversión, tienen motivos ocultos.
- Un matrimonio grande puede ser un agujero en el bolsillo para la pareja / padres pero, de hecho, genera ingresos para muchas empresas que facilitan las bodas
- La gente anhela la aceptación y admiración de otras personas. Eso es parte de la naturaleza humana. Esto también es motivo de celebraciones extravagantes. Este deseo debe ser controlado y una persona debe tener en cuenta su situación financiera antes de gastar mucho.
- La gente a veces gasta mucho para divertirse mucho. Si ese es el caso, puede aceptarse, siempre y cuando la situación no se recupere en el futuro. Al final del día, la felicidad es todo.