Una habilidad clave es la capacidad de comprender cómo se percibirá una declaración escrita. Si escribes algo de cierta manera, ¿cómo lo tomarán los demás? ¿Qué leerán en tu tono o frase? Y luego ser capaz de modificar en consecuencia.
Otra habilidad es comprender que las redes sociales tienen que ver con encontrar formas de ayudar a las personas y luego ser buenos para hacerlo. No se trata de enviar spam al mayor número posible de personas con cuán bueno eres. Eso no funciona en persona, y tampoco funciona en línea.