- Te ayudaría si me dieras ejemplos reales.
- Aquellos que actúan como “líderes” y, a veces, son simplemente idiotas que coaccionan a otros para su propia satisfacción con el pretexto de “tratar de ayudar”, “preocuparse” o “oh, ¡simplemente soy fuerte y de buena opinión!” Pueden pretender que son superiores, llamándolo “amabilidad” cuando tratan de cambiar a otras personas, o señalar las deficiencias de las personas “débiles” … Todos para su propio disfrute sin importarles que su propia mierda también apesta. No son fuertes, ni “dominantes”. Sólo narcisistas. No le hagas caso. Necesita tener confianza en sí mismo para tener nervios, y necesita nervios para tener cualquier posición de poder, ya sea formal o informal.
- TÚ. DAR. TAMBIÉN. MUCHOS. Joder Al menos demasiados para tu propia salud. ¿Es probable que una persona “fuerte / dominante” diga lo que piensa y te rechace si no cree que estás “a la altura”? ¿Qué te hace decir que tienen “carácter fuerte”? ¿Seguro que no es la habilidad de ser un burro? NO. Algo acerca de estas personas te hace notar tu baja autoestima, al menos en comparación con ellos. Hacen sus propias reglas y marchan a su propio ritmo, mientras que en secreto eres una oveja indefensa que no puede predecirlas y no puede sentirse “segura”. Pueden pretender saber lo que están haciendo. Por otra parte, es probable que se vuelva a adivinar y busque la aprobación, incluso si no se da cuenta o si quiere hacerlo. Si no te alimentan, te golpean o te pagan, ¿por qué debería importarle tanto su pequeña aceptación? Es tu vida, y la vida es demasiado corta como para pasarla escondida de alguien . Después de todo, si intentas complacer a todos, ¡nunca harías nada o te divertirías!
- En cuanto a “meterse en una disputa con esa persona … sentirse derrotado”, ¿alguna vez se te ha ocurrido que el objetivo de cualquier comunicación es entendernos mutuamente para que ambas partes lleguen a soluciones justas, no para “derrotarlos”? Por supuesto, algunas personas son demasiado arrogantes para escuchar, asumiendo que deben “ganar” argumentos sin sentido. Eso es probablemente lo que te intimida tanto, ¿verdad? Lo que digas va por un oído y sale por el otro. ¡¡¡No valen un NANOSECOND, PICOJOULE, o UNA SOLA NEURONA DE ENCIMA del precioso tiempo / energía / emociones !!!
El hombre, el niño y el burro. Esopo. 1909-14. Fábulas. Los clásicos de Harvard