¿Por qué alguien secuestraría a un niño?

Todos los deseos básicos de la naturaleza humana entran en juego aquí. Los niños son posiblemente la cosa más preciosa del mundo para los padres, que están dispuestos a hacer cualquier cosa para recuperarlos, incluido el pago monetario.

Para el caso en sus detalles, ese es el deseo de poder. La capacidad de ejercer un poder absoluto sobre la vida o la muerte, la felicidad o el dolor de otro ser es más potente que cualquier otra droga. Ha generado crímenes que van desde la violación hasta el genocidio. El propio Stalin tenía listas de personas condenadas que le enviaban por correo para poder ejercer este poder, salvando vidas con un simple golpe de su pluma.

El deseo de poder es innato en todos los humanos. La única razón por la que no ha causado el colapso de la sociedad es que las construcciones sociales (o controles evolutivos) se crearon para mantenerlo bajo control, como la moralidad, el altruismo, etc.