Como dice un sabio, “la práctica hace al hombre perfecto”. No puedes aprender a nadar sin dejarte caer en las aguas. Sin embargo, debes comenzar con aguas poco profundas desde el principio. Del mismo modo, para mejorar las habilidades de las personas, debes interactuar al principio. Pero debe mantener una interacción moderada para que sus inhibiciones no se intensifiquen debido a los temores o errores que cometa inicialmente. Un error es algo de lo que te falta tomar una lección. Abraza tus errores y encuentra una manera de superarlos. Sus errores servirán como escalones para el éxito en sus esfuerzos.
Abraza tus inhibiciones y busca maneras de superarlas. Si se trata de ser juzgado, hablar con amigos o frente a un espejo ayuda. Si se trata de la fluidez, tener temas al azar a la mano y hablar durante varios minutos sobre el mismo resulta útil. Donde hay voluntad hay un camino. Apunta estrategias para adaptarte a ti mismo. Encontrará varias sugerencias en los libros sobre habilidades de comunicación, si no puede descubrir alguna. Sin embargo, creo que la mejor manera de aprender es hacerlo y experimentar las lagunas.
Al igual que cualquier otra habilidad, aquí también el compromiso y la acción tienen una importancia inevitable. Ellos se alimentan mutuamente. Ponte en marcha, llegarás más lejos con cada día que pase. ¡Todo lo mejor!