¡Porque nos reflejan!
“Si odias a una persona, odias algo en él que es parte de ti mismo. Lo que no es parte de nosotros mismos no nos molesta “. – Hermann Hesse
Odio a las personas sin metas y ambiciones. Porque en el fondo, me resiento por no establecerme metas y perseguir mis sueños.
¡Odio a las personas que muestran que son inteligentes! Porque en el fondo, me siento tonto a su alrededor y como mecanismo de defensa, yo también comienzo a mostrarme como un asno inteligente.
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Entonces, las personas que odiamos, son a veces, como un espejo para nuestro frágil ego. Sacan a la luz las inseguridades sub-concientemente enterradas.