Si está buscando un término para alguien que considera que las cosas sin importancia son demasiado importantes, intente mezquino, superficial, superficial, frívolo, juvenil, trivial, infantil, vano o pretencioso. Estos términos implican valores defectuosos; Tener buenos valores, pero la incapacidad de controlar lo que uno preocupa, podría denominarse neurótico, paranoico o ansioso.
Con una connotación más positiva, alguien que se preocupa mucho por todo (potencialmente llevado al extremo) podría ser considerado como meticuloso, concienzudo, sensible, escrupuloso o altruista. Pero la mayoría de las veces diría que les preocupan las cosas que sí importan, incluso si las personas que las rodean no lo reconocen.