¿Las personas codiciosas son infelices?

Sí lo son. La codicia viene de tener un hoyo sin fondo en el interior; la gente codiciosa está tratando de llenar ese abismo sin fondo agarrando más y más y más, pero nunca es suficiente. Muy triste, de verdad

Supongo que a veces deseamos que haya un cierto equilibrio divino y “son codiciosos porque son infelices”, o al revés: “la codicia crea cierta infelicidad”. Pero la vida real es más complicada. Las personas codiciosas que he conocido estaban satisfechas consigo mismas y con su vida. También hay factores culturales, por ejemplo en el mundo de los negocios.

Hubo un momento en que los padres estaban furiosos de que la ley protegiera a los niños al imponer un límite a la edad en que un niño puede trabajar en una mina: necesitaban el dinero demasiado. La primera ley que leí acerca de establecer el límite de edad a los 8 años. Los jóvenes adolescentes que trabajaban en minas aún eran comunes en mi generación: el trompetista Maurice André, quien murió en 2012, trabajó en la mina a los 14 años. Nuestra cultura de hoy es diferente. De manera similar, los propietarios de la mina protestaron por la primera ley que exigía que un médico fuera designado por el mío. Usted ve, todo el mundo tiene una “línea de fondo” en mente. Y eso varía con el cronómetro y la cultura. Aquí André:

Siempre pensamos que lo que hacemos, la forma en que nos comportamos es “normal”. No conoces a muchas personas que se ofrecen voluntariamente para decir: “Soy una plaga”, “Soy codicioso”, “Tengo envidia”. Vas a visitar a los prisioneros y lo primero que te dicen es “Soy una buena persona”. Bueno, a veces lo son, pero nunca ven cuál es su problema.

Creo que nuestro cerebro tiene un mecanismo de protección. Nos cuesta mucho vernos a nosotros mismos de mala manera.

Tal vez sí. La persona codiciosa no es feliz. Pero si convierten su codicia en su deseo, entonces serán una persona feliz.

(Hay diferencia entre codicia y deseo.)

No necesariamente la felicidad es una elección, puedes ser feliz y, en teoría, ser codicioso, egoísta, desagradable, todo es posible nunca suponer nada