Esto parece que debería ser un póster o algo así, pero lamentablemente no es el caso. He encontrado que las pequeñas cosas son la sal de la vida. Recordar los cumpleaños de las personas y enviar tarjetas reales son pequeños ejercicios muy importantes que le dan tanto a usted como al destinatario.
Hay tantas cosas sin importancia que ni siquiera puedo comenzar a enumerarlas aquí, pero son las que cambian la vida.