Ahora mismo me estoy odiando. ¿Está bien o es eso holgazanear?

Odiarte es odiarte a ti mismo. Es una ocurrencia normal, pero eso no significa que esté bien. Examina por qué te sientes así. Identifica si tienes expectativas irrazonables de ti mismo, como expectativas que no esperas de otros seres humanos, pero que tienes de ti mismo. Por ejemplo, si quisiera que todas las personas del planeta me gustaran, es una expectativa ridículamente irrazonable. No espero eso de nadie más. Y ni siquiera es posible para la humanidad, sino también para Dios. Independientemente de las creencias, hipotéticamente digamos que Jesucristo realmente es el hijo de Dios, hay personas que lo odian. Hay personas que odian la idea misma de Dios. ¿Cómo puedes un simple humano esperar ser más grande que toda la humanidad y más grande que los dioses? Independientemente de si su expectativa se establece en ese nivel ridículo o si se está odiando a sí mismo por las malas decisiones que tomó, todavía no es razonable esperar que no cometa errores grandes o pequeños en su vida. Puedes odiar el fracaso, puedes odiar un error, así que tan pronto como te identifiques con tus errores y fracasos, te garantizamos que te odiarás. Tal vez las acciones no son lo que odias de ti mismo. Tal vez odies cómo te ves o lo débil que eres o lo inteligente que eres. Esas son todas las cosas que pueden ser influenciadas por lo que piensas y lo que haces. Aprender a aceptarte a ti mismo por lo que eres y mejorar lo que eres para hacer lo mejor es parte del proceso. Incluso las personas que parecen las más bellas, inteligentes y fuertes pueden sentirse así porque la humanidad siempre querrá más. Es nuestro deseo y nuestro enfoque ser lo mejor, por lo que es mejor aprender a escuchar su tristeza cuando falla, para que sepa lo que necesita mejorar, sin distraerse con los “qué pasa si”, “debería tener” y “sólo si”. . Sin creer la voz que te dice que no eres nada o nunca serás nada. Siente la tristeza plena y sinceramente y sentirás la felicidad plena y sinceramente a cambio. El equilibrio es la naturaleza de nuestro mundo.

Lamento que te sientas de esta manera. Pregúntese por qué se odia a sí mismo y cómo hacerlo mejorará las cosas.

Las mayores mentiras que solemos decir son las que nos decimos a nosotros mismos.

Naciste con un propósito, creado por Dios con dones y talentos para cumplir ese propósito. Nunca encontrarás ese propósito odiándote a ti mismo. En cambio, mi oración es que dirijas tu corazón hacia Dios y le pidas que te guíe hacia el amor que Él tiene para ti y hacia el propósito para el cual estás aquí. Todos tenemos un propósito o no estaríamos aquí. Dios lo diseñó con todo lo que necesita para vivir su propósito si lo busca y le permite que lo guíe a usted y su vida hacia las bendiciones que Él tiene para usted.

Mis pensamientos y oraciones están contigo