Es bueno que te gustaría que tu hija vuelva a jugar al netball. Pero, ¿le has preguntado por qué abandonó el juego en primer lugar? Puede haber muchas razones por las cuales los niños se dan por vencidos con algo que antes solían amar. A veces es la presión de los compañeros, o puede ser una decepción, o sus intereses han cambiado.
Antes de que puedas convencerla de que juegue a la pelota, debes hablar con ella y ver si sus intereses han cambiado. Existe la necesidad de que los padres no empujen sus pasiones a sus hijos. Dicho esto, si su hija dejó de practicar un deporte o algo que les encantó antes, descienda a la causa raíz y vea si se puede arreglar. Si es así, tu trabajo será fácil.