A menudo digo cosas como “Espere, espere, espere” a mi hijo. Creo que es un comportamiento aprendido: como si me hubiera acostumbrado a que no me escuchara, así que refuerzo el mensaje en triple forma.
En esencia, todo se reduce a énfasis. En muchos idiomas, las palabras se duplican para varios propósitos: forma plural o intensificación del significado. Lo que usted da como ejemplo tiene la misma función, y en cuanto a las razones por las cuales las personas sienten la necesidad de intensificar su mensaje, esas son diferentes. La necesidad de ser escuchado. La necesidad de captar rápidamente la atención del oyente. El deseo de hacerse importante y convincente. La necesidad de ser siempre la correcta en un argumento. Y así sucesivamente y así sucesivamente…