Hay varias cosas que he aprendido de las personas que me rodean. Incluso el más pequeño de los incidentes que pueda encontrar trivial, le enseña cosas sobre reflexionar y considerar cuidadosamente.
Sin embargo, hay dos cosas que mis mejores amigos me enseñaron y que han dejado una huella indeleble en mi mente. Estos fueron más como consejos de ellos.
1. Que debería aumentar mi valor nominal, mi patrimonio neto.
Deja de ser una criatura tímida y pide que todo venga a ti solo. Debes dar a las personas una razón por la cual deberían gustarte y preferirte a los demás. Debes construir tu propia personalidad. Una agradable y una carismática. No necesitas mostrar a todos tu verdadero yo siempre. Y, está bien ser egoísta. Básicamente, es algo así como, debería aumentar mi sustancia / estándar y comercializarlo correctamente.
2. Que no debería juzgar un libro por su portada.
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Cada uno tiene una historia diferente. Lo sabríamos si intercambiáramos zapatos. Por ejemplo, la afinidad de las personas hacia el sexo opuesto no podría considerarse un pecado. Todos ellos tienen sus necesidades. Las acciones de las personas no deben ser observadas o comentadas con entusiasmo. Porque solo vemos lo que han hecho, pero nunca la causa que los impulsa a hacer lo que hacen. Así que básicamente, me enseñó a centrarme en lo que hago.
Entonces, mientras uno me enseñó a refinarme, el otro me enseñó a hacerlo con humildad.
Los conocí cuando estaba pasando por una fase de depresión y me han ayudado a recuperarme en gran medida.
Amigos para siempre es un mito. Pero me alegro de haberlos encontrado cuando más los necesitaba. 🙂