En esta era en la que los mensajes de texto y los emojis enviados a otra persona se consideran “mantenerse en contacto”, elegí ir por el camino antiguo.
Me encanta enviar cartas escritas a mano a mis amigos, completas con papelería adornada y un sobre a juego, aplicando mi dirección en relieve en la parte delantera, seleccionando el sello correcto que se ajuste al tema del diseño de papelería. Me tomo tiempo para decidir lo que quiero decir e intento que mi mensaje sea significativo y sincero.
Sin lugar a dudas, no he recibido más que sinceras gracias por el esfuerzo; a menudo escucho que “es tan bueno abrir mi buzón de correo y en un montón de facturas y basura, veo una carta, solo para mí, esperando”. Más de una vez he escuchado: “Ya nadie hace eso. Nadie se toma el esfuerzo y simplemente me envía mensajes de texto”.
Disfruto el proceso de enviar las cartas y he visto la reacción de aquellos que me importan. Así es como mantengo vivas las amistades.
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Avery Kate