A algunas personas simplemente no les gusta hablar, así que nunca las ponga en una situación incómoda presionándolas para que hablen. Su compañero de cuarto puede ser introvertido, privado o simplemente no tan hablador.
También es posible que solo necesiten sentirse más cómodos con usted si solo han estado viviendo juntos por un corto período de tiempo. La confianza lleva tiempo.
Aún así, la única manera de averiguar si a su compañero de habitación le gustaría hablar es intentarlo. Una buena manera de entablar una conversación es preguntarle a la persona sobre sí misma: parecerá genuino, amable, atento e interesado en ella. Más importante aún, con quien esté hablando no se sentirá estresado sobre cómo mantener la conversación. ¡Manejas la discusión sin tener que hablar mucho tú mismo!