Tengo dos teorías sobre esto, la primera es práctica / experiencial, la segunda más teórica.
- La mayoría de nosotros, como niños, teníamos categorías muy específicas de ropa diaria / de juego y ropa para ocasiones especiales. Estar acostumbrados a que los padres nos dijeran qué era apropiado nos condicionó a guardar la ‘buena ropa’ para algo especial.
- Como seres humanos, siempre esperamos que las cosas mejoren. Entonces, guardamos lo que pensamos de nosotros como nuestras mejores cosas, sea lo que sea, para el mejor momento. Lo último nunca se acerca, por lo que demoramos lo mismo.