¿Por qué me gusta burlarme de la estupidez de otros, pero también de la mía?

Porque eres humano y tienes sentido del humor. Es saludable denigrar a uno mismo y burlarse de los demás dentro de lo razonable. El humor puede ser una gran herramienta para establecer la humildad y el parentesco, haciendo que la comunicación sea más fácil y agradable.