Sigue gritando “¡Ya te dije que lo siento!” En su cara. Ese es, con mucho, el mejor ataque contra esas personas ingratas. Ciertamente las personas que sobrepasan su condición de víctimas. Los hace sentir culpables en lugar de ti. Aquí están los 10 principios, usar las camisetas, hacer que todos te respeten, nunca vuelvas a sentir culpa, bueno, no más de lo que se requiere.
10 principios del movimiento de nunca decir perdón dos veces
- Necesito ser absuelto, por todos, de cualquier pecado, una vez que expresé mi culpa.
- En retrospectiva, todas mis acciones, sin importar cuán deplorables sean, deben tener alguna causa fuera de mi ámbito de influencia o al menos mi intención. Por lo tanto, decir lo siento una vez debería ser suficiente.
- Tengo la necesidad y por lo tanto el derecho a ser protegido de cualquier comentario, comentarios sarcásticos o recordatorios sobre dicho pecado, ya que ya sufrí lo suficiente como para reconocerlo.
- Todos los demás no pueden cometer errores, como no seguir los mandamientos anteriores. No puedo ver lo que está mal con estas expectativas de un mundo justo en el que necesita llevarse bien conmigo
- Por lo tanto, las personas que no cumplen las normas lógicamente deben intentar insultarme a propósito y, por lo tanto, intimidarme, haciéndome la víctima por defecto.
- Especialmente las víctimas de dicho pecado deben aplaudir primero mi magnánimo reconocimiento de culpa, como lo haría yo. Aquí, al menos, soy la verdadera víctima … y deberías ayudarme a olvidar cualquier discrepancia entre mi imagen personal y la realidad, ahora que una vez admití ser culpable.
- Especialmente las víctimas, de dos años de edad o más, deben saber que hacerme decir que lamento más de una vez es más equivocado que lo que deben estar experimentando.
- Para ti, quizás todo esto parezca egoísta, pero para las personas moralmente superiores como yo, cometer errores es muy raro, por lo que los costos de pedir perdón y la culpa asociada son mucho más altos.
- Por otro lado, puede que te ayuden si te lo recuerdan un par de veces (según lo considere apropiado) sobre el imbécil que fuiste una vez. No como un castigo, sino como una herramienta educativa, para afinar mejor su brújula moral.
- Tenga en cuenta. Este mundo se trata de personas que quieren decir perdón como yo porque somos sensibles y empáticos, y personas como usted que tienen que decir perdón porque están degradados y equivocados.