Tengo este problema también. Cada vez que me tengo que preparar para los exámenes, me comprometo a sentarme con dedicación durante horas y no a renunciar. Sin embargo, siempre termino no abriendo mis libros hasta una semana antes de los exámenes, me abro paso a través de los planes de estudio y acabo con la cantidad mínima de preguntas que pueda en el momento dado. De alguna manera me las arreglo para obtener una buena puntuación, así que nadie me cree ni a mí ni a mi estilo de estudio.
Después de observar este patrón durante muchos años, me di cuenta del mecanismo subyacente. Tiendo a establecer metas poco realistas que no son compatibles con mi tipo de personalidad. Soy perezoso y no debería simplemente prometerme a mí mismo que haré todo el curso y también lo revisaré. Del mismo modo, cuando hacemos otros compromisos, debemos tener en cuenta nuestros resultados y luego hacer promesas a los demás o a nosotros mismos.
Una vez que conozca su potencial y capacidad, créame que será más realista en sus compromisos y así serán sus resultados