“Vivir en” no se trata de crear una réplica de ti mismo para el tiempo inmemorial, sino de dejar un legado al contribuir genéticamente y culturalmente a las generaciones futuras. Está inspirado tanto por el impulso biológico de reproducirse como por la gratificación de saber que has tenido un impacto (positivo) en el futuro de la humanidad. Incluso si su legado se desvanece con el tiempo, las partes más valiosas de él (probablemente) perdurarán.
Hay otras formas de establecer un legado, pero tener hijos es quizás la más común y aún bastante popular y efectiva.