¿Por qué el aislamiento vuelve loco a alguien?

Un par de grandes razones fuera de mi cabeza; Nacemos bastante indefensos y subdesarrollados como mamíferos. La razón es que nuestros cerebros y cráneos son tan condenadamente grandes, que una madre humana tiene que dar a luz relativamente pronto. En segundo lugar, somos animales sociales. Una gran parte de ese gran cerebro se dedica a reconocer las caras y las emociones que se expresan en las caras. Interacción verbal. Estamos diseñados como primates para ser sociales.

En el tiempo de nuestros antepasados ​​lejanos, nos enfrentamos a la inanición, la hipotermia, la vulnerabilidad a los grandes carnívoros. Somos lentos, no tenemos pieles, se sobrecalientan fácilmente, no tenemos garras y esos cerebros grandes consumen muchas calorías para funcionar bien. Se ha especulado que los humanos aprendieron a cocinar para que pudiéramos digerir los alimentos de manera más eficiente específicamente para que nuestros cerebros funcionen de manera óptima. De todos modos, la supervivencia humana, y la de nuestros ancestros recientes durante millones de años, dependió de que trabajáramos en grupos y no estuviéramos solos. Una persona solitaria era la carne muerta, por lo que no hay muchos recursos para la supervivencia en solitario.

Debido a que todos necesitan un mundo en el que vivir, cuando todo el mundo se reduce a usted, puede perder el contacto con lo que significa vivir en el mundo real. Puede distorsionar su pensamiento (formas de procesar información e interacciones) y no le permite la flexibilidad cognitiva que tendría si se involucra en prácticas sociales.

Porque el objetivo mismo de la existencia humana es la supervivencia por reproducción. El aislamiento frustra este propósito y la continua frustración conduce a la locura. La pregunta que sigue es: ¿por qué la frustración vuelve locas a las personas?

No podría decírtelo. No puedo vivir sin eso. Y, me niego a tomar en serio a cualquiera que no pueda estar solo. Conocí a una mujer de 50 años que nunca había comido sola en un restaurante y solo pensé en lo lamentable. Qué ser humano tan dependiente y lamentable.

Somos criaturas sociales. Sin contacto humano, nos deprimimos y eventualmente sufrimos un colapso.