¿Cómo cambiaría la vida si las personas pudieran donarse cerebros entre sí?

Todo sería diferente.

Primero, la mayoría de las enfermedades cerebrales serían fácilmente curables. Tiene Alzheimer? ¡Done algunas placas de beta-amiloide a un investigador! ¿Tiene toxoplasmosis en la sífilis? ¡Dona los patógenos de tu sistema! Algunos ataques podrían aliviarse donando el coágulo de sangre de su sistema.

Además, muchos materiales biológicos podrían ser fácilmente cosechados. Si desea fabricar grelina, por ejemplo, simplemente indique a una persona hambrienta que done la hormona directamente al laboratorio o algo así.

El trasplante parcial de cerebro también permitiría prolongar la vida. Para funcionar, un cerebro necesita sangre oxigenada. Si alguien está esperando un trasplante de riñón y está a punto de morir por envenenamiento de la sangre, por ejemplo, los médicos y otros miembros del personal pueden donar sangre cerebral segura a las arterias del paciente y el paciente puede donar la sangre mala a la basura o lo que sea.

¡Esta habilidad revolucionaría la medicina!