¿Cuál es el mejor consejo que su hijo le dio?

Esa es una sugerencia muy dependiente de la edad y apropiada. Sólo algunas ideas generales para casi cualquier grupo de edad. Los buenos modales abren muchas puertas, confía pero verifica, no gastes el dinero que no tienes, valórtate y no permitas que las personas te lo quiten. Si quieres algo lo suficiente, es posible que tengas que probar muchas cosas de muchas maneras para obtenerlo. Mantenga una mente abierta y no se apresure a juzgar, nunca conocemos realmente las circunstancias de otras personas. Intenta mantener el lado feliz de la vida y compártelo con los demás, incluso si es solo una sonrisa o una ola. Sea tan generoso con lo que tiene en todas las cosas, esta mezcla con una actitud sensible pero amable trae algunas sorpresas encantadoras.

Eso debería darle un comienzo.

Mi hijo de cuatro años, que tiene autismo, rara vez habla, y cuando lo hace, es aún más raro cuando usa una oración completa. Una vez, mi madre estaba en mi casa y estábamos peleando, ni siquiera recuerdo qué, y mi hijo se acercó a mí, me tocó el brazo y me dijo: mamá, no grites, respira hondo y un beso. Mi madre y yo, sorprendidos por lo que estaba sucediendo, dejamos de gritar por completo y estábamos muy felices porque él habló. ¡Y parecía tan contento consigo mismo! Así que ahora, antes de hablar con mi madre, respiro profundamente y siempre termino nuestras conversaciones con un abrazo.

Recibí una oferta de un gigante de la industria del silicio. El trabajo requeriría que yo esté en la oficina por lo menos 12 horas al día durante el primer año. Estaba discutiendo tomar la posición con mi esposa y nuestro hijo de 4 años estaba en el auto. El salario sería lo suficientemente grande como para que mi esposa pudiera cambiar de tiempo completo a tiempo parcial. Acordamos que si tomaba el trabajo, ella haría eso para compensar el tiempo en que no estaría en casa cuidando a Max. (Nuestro hijo) En ese momento mi hijo me cogió la mano y me dijo que quería hacerlo. cuida de mí, y me preguntó si yo también cuidaría de él.

En ese momento decidí no aceptar la oferta. Aprendí que ninguna cantidad de $ puede compensar el tiempo perdido con sus hijos.

De joven: “Escúchame antes de comenzar una respuesta”

Como adulto: “No des consejos a menos que se lo pidan primero”.