Lo más importante es darse cuenta de que su valor nunca dependió de lo que otras personas piensan de usted, bueno o malo. Apreciamos el tiempo que tenemos y los sentimientos que recibimos al ser atendidos, pero cuando se detiene, seguimos siendo la misma persona. Es en ese momento que necesitas aprender a cuidar de ti mismo. En un nivel más espiritual, sí, aprender y aceptar a Jesucristo como un salvador puede ser útil, pero creo que el momento es incorrecto. Creo que crearía una experiencia espiritual superficial en este momento exacto. Primero tienes que aceptar que tu valor no dependía de la otra persona. Luego, después de un tiempo de pensar en eso y de reflexionar sobre todos los buenos momentos que pasaste, te das cuenta de que los recuerdos son un tesoro invaluable. Acepte el tiempo que tuvo y luego, después de un tiempo de sanación, quizás un mes o dos, quizás desee visitar una iglesia que cree en la Biblia. Tienes que tener cuidado de no caer en una trampa yendo a un culto. Te pueden aspirar como un vacío y nunca dejarte ir. Es por eso que debes estar realmente bien contigo mismo antes de salir a buscar. Eso evitará que te caigas de alguien con una sonrisa que está tratando de completar su cuota al atraerte.
Después de perder a mi mejor amigo, mi papá, en un par de días comencé a pensar en las miles de cosas que hicieron que nuestra relación fuera especial. Las cosas que nos encantaba hacer juntos. Entonces comencé a agradecerme por tener esas experiencias y las dejé vivir en mí. No me detuve en el hecho de que no los tendría más, estaba agradecido de tenerlos en primer lugar. Trabaja en eso y estarás bien.